Yujuuuuuuu, Estamos en Castellón!

Después de zarpar el lunes por la mañana de Sant Elm, y dejar definitivamente Mallorca por mi popa hemos puesto rumbo a Columbretes, eso si,... sin nada de viento. Hemos tirado de mi motorcito más de lo que en principio habíamos planeado.
Joan lo ha intentado con la pesca, con el mismo resultado de siempre,... no nos ha picado nada de nada. Ni usando las armas que le proporcionó Pep. Menos mal que a bordo había muy buen desayuno y los ánimos no decayeron. Incluso creemos que algún pez picó a un señuelo que no tenía anzuelo, que solo era para excitarles. Finalmente llegamos a Columbretes después de doce horitas de travesía, y nos amarramos a una de las boyas exteriores (por mala suerte, las del interior estaban ocupadas por veleros franceses,..., estos franceses se las saben todas!) Pero no hay mal que por bien no venga y disfrutamos de una bonita puesta de sol entre nubes, que regada con uno de los vinos que Juan Ignacio regaló a Joan se hizo inmejorable.
Esta mañana tempranito, desayuno y rumbo a Castellón, que había algo de viento y lo queríamos aprovechar. Aunque claro, muy a pesar de Mila, el viento en Castellón o sopla muy fuerte o no sopla nada de nada, y los chicos han acabado plegando el spi en la cubierta y arrancando motor, para finalmente arribar a las tres de la tarde después de unos días de muy buen tiempo.